Diddy Combs demanda por difamación ante acusaciones falsas

Diddy demanda por difamación: Acusaciones inventadas sobre videos inexistentes

Los Ángeles se convierte en el escenario de una nueva controversia, ya que los representantes legales de Sean «Diddy» Combs han interpuesto una demanda por difamación en contra de un hombre que, según sostienen, hizo declaraciones engañosas sobre la existencia de vídeos que supuestamente lo implican en abusos sexuales a ocho celebridades. Este movimiento legal fue presentado en una corte federal de Nueva York el miércoles.

Falsas acusaciones y búsqueda de atención

La demanda señala a Courtney Burgess y su abogado, Ariel Mitchell, acusándolos de crear «mentiras escandalosas» para capitalizar el interés mediático en torno a Diddy, quien enfrenta serias acusaciones de tráfico sexual desde septiembre. En la denuncia, Combs también dirige su mirada hacia Nexstar Media, la empresa dueña de la cadena NewsNation, que emitió las acusaciones de Burgess sin verificar su veracidad. Según el documento judicial, los vídeos en cuestión nunca han existido.

Erica Wolff, abogada de Diddy, subrayó la gravedad de la situación, afirmando: «Estos acusados fabricaron y difundieron deliberadamente mentiras, ignorando la verdad. Sus declaraciones han distorsionado la percepción pública y contaminado el proceso judicial. Esta denuncia debe enviar un mensaje claro: no se tolerará la difusión de falsedades que amenacen el derecho del Sr. Combs a un juicio justo».

Reacciones y defensa de la verdad

Hasta el momento, ni Burgess ni Mitchell han ofrecido comentarios sobre las acusaciones. Mientras tanto, el portavoz de Nexstar Media Group optó por no abordar el asunto. Por su parte, Diddy, de 55 años, se ha declarado inocente de las alegaciones de tráfico sexual y permanece detenido, esperando su juicio programado para el 5 de mayo, después de que se le negara la libertad bajo fianza.

Después de la detención de Combs, Burgess empezó a realizar declaraciones a diversos medios y personajes influyentes en redes sociales, afirmando que poseía memorias USB que contenían pruebas incriminatorias de Kim Porter, la difunta actriz y modelo que tuvo una larga relación con Diddy y fue madre de cuatro de sus hijos. No obstante, los vídeos que Burgess asegura tener nunca han sido difundidos.

El New York Times reportó en noviembre que personas cercanas a Porter no estaban familiarizadas con Burgess y expresaron sus dudas ante sus afirmaciones. De hecho, Burgess admitió no conocer personalmente a Diddy. En el contexto de la investigación federal, las autoridades no han identificado públicamente a Burgess en relación con el caso penal.

En entrevistas, Burgess mencionó que la policía había confiscado los vídeos en su hogar, y su abogado también notificó que los había entregado al gobierno. Sin embargo, la demanda sostiene que estas afirmaciones son «completamente falsas», argumentando que «no existe tal vídeo que haya sido entregado a las autoridades».

Con esta acción legal, Diddy no solo busca limpiar su nombre, sino también reafirmar su derecho a un juicio imparcial en medio de un mar de acusaciones que parecen, según su defensa, completamente infundadas.