Flatteries de Líderes Extranjeros a Donald Trump: Estrategias en un Juego de Poder

En un reciente encuentro en Washington, el primer ministro japonés Shigeru Ishiba se puso en la línea de fuego al elogiar al ex presidente Donald Trump, mientras este hacía alusiones sobre posibles tarifas a Japón. La situación se tornó interesante cuando Ishiba tuvo la oportunidad de contrarrestar las amenazas económicas de Trump con comentarios positivos sobre su personalidad y liderazgo.

Ishiba Elogia a Trump

Durante la reunión, Ishiba no dudó en describir a Trump como una celebridad, sorprendiendo tanto al presidente como a los presentes. «En televisión impone, tiene una fuerte personalidad, pero al conocerlo, es sincero y posee un gran ímpetu por los Estados Unidos», expresó el primer ministro. Aseguró que sus elogios no eran una estrategia para ganarse su favor, sino un intento genuino de fomentar «la paz mundial» y «la estabilidad regional».

Estrategia de Halagos en la Diplomacia

El evento de Ishiba marca una tendencia entre líderes mundiales que han optado por el camino de la adulación ante un presidente que ha demostrado ser impredecible en sus políticas exteriores. Aunque algunos expresan temor ante su regreso al poder, los intentos de acercamiento continúan.

Por ejemplo, recientemente el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, describió a Trump como «el mejor amigo que Israel ha tenido en la Casa Blanca», mientras que el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, hizo una propuesta inusual relacionada con el encarcelamiento de migrantes.

La Futilidad de la Adulación

Elizabeth Shackelford, ex diplomática de EE. UU., no es del todo optimista respecto a la eficacia de estos halagos. Comenta que es una «tarea inútil» tratar de obtener favores de Trump a través de la adulación. “No creo que nadie logre lo que quiere de él. Es posible que piensen que su amabilidad los protegerá de su ira”, comentó.

Un Patrón Historial

Históricamente, muchos líderes han intentado establecer vínculos cercanos con Trump. Desde la aclamación del presidente francés Emmanuel Macron en el pasado hasta el intento de Polonia de renombrar una base militar en su honor, queda claro que el arte de la alabanza suele ser un recurso favorito en la diplomacia.

Sin embargo, no todos los intentos resultaron fructíferos. Como recordamos, en 2018, Trump impuso tarifas contra Canadá después de que el primer ministro Justin Trudeau intentara un acercamiento diplomático amigable.

El Juego de Poder Continúa

A pesar de las críticas y las advertencias de conducta, muchos líderes siguen viendo en la adulación una forma de avanzar dentro de la administración Trump. Desde llamadas en los medios de comunicación hasta reuniones estratégicas en Washington y Mar-a-Lago, todos parecen alinearse en una danza diplomática a la espera de la reacción de un presidente cuya reciprocidad es difícil de predecir.

En este escenario, Ishiba parece estar buscando un buen ingreso ante un Trump que hace guiños de aprobación a los intentos de amabilidad. Si bien el enfoque parece poco fiable, la realidad es que en el panorama internacional, la adulación a Donald Trump es parte de un juego en constante evolución.