Katie Porter busca la gobernación de California en 2026

Katie Porter, excongresista democrática, ha hecho su entrada oficial en la carrera por la gobernación de California en 2026, sumándose a un competitivo grupo de candidatos que podría experimentar un cambio significativo si la exvicepresidenta Kamala Harris decide participar en la contienda. En un video de lanzamiento de campaña, Porter se presenta como una voz firme y decidida que se opone a la administración del presidente Donald Trump, especialmente en un estado donde las tensiones con la Casa Blanca han aumentado en temas fundamentales como la gestión del agua y los derechos de los inmigrantes.

Un compromiso a la acción

La candidata ha manifestado su intención de ser un contrapeso agresivo a las políticas de Trump, afirmando: «En el Congreso, me aseguré de que la administración Trump rindiera cuentas cuando afectó a los estadounidenses. Como gobernadora, no cederé ante Trump cuando perjudique a los californianos, ya sea retrasando la ayuda en desastres o atacando nuestros derechos y comunidades.» Estas declaraciones han resonado entre sus seguidores, consolidando su imagen como una luchadora por los derechos de los ciudadanos.

Un campo de candidatos competitivo

La elección para reemplazar al actual gobernador demócrata, Gavin Newsom, cuenta con una lista creciente de candidatos. La situación podría cambiar drásticamente si Harris decide lanzarse a la gobernación. A pesar de que la exvicepresidenta no ha tomado una decisión definitiva desde su salida de Washington tras una fallida candidatura presidencial, es amiga de Porter y ha indicado que podría apartarse si Harris se postula. Porter fue designada por Harris en 2012 como monitora bancaria en un acuerdo nacional sobre hipotecas.

El politólogo Jack Pitney de Claremont McKenna College señala que si Harris se suma, su fuerte presencia podría hacer difícil que otros candidatos queden en pie. «Es probable que ella gane la nominación demócrata, y los demócratas tienen una buena posibilidad de retener la gobernación,» añadió Pitney.

La relevancia de Porter en la contienda

Porter, que previamente intentó conseguir un escaño en el Senado de EE. UU. el año pasado, es reconocida por su capacidad de recaudación de fondos de pequeñas donaciones, lo que la posiciona como una de las figuras más conocidas. Junto a ella, se encuentran otros candidatos como el exalcalde de Los Ángeles, Antonio Villaraigosa, y la actual vicegobernadora, Eleni Kounalakis.

En un estado donde los demócratas superan a los republicanos registrados en casi dos a uno, se espera que el partido mantenga el cargo sin grandes complicaciones. En el lado republicano, el sheriff del condado de Riverside, Chad Bianco, se ha convertido en el primer candidato importante en anunciar su intención de sustituir a Newsom, responsabilizando a los demócratas de la crisis de vivienda y la pobreza.

Las expectativas de un sistema electoral impredecible

Cabe destacar que, incluso con la posible entrada de Harris en la carrera, el sistema primario abierto de California puede resultar impredecible. Aquí, todos los candidatos se presentan en una única boleta, sin importar su partido, y solo los dos que obtengan más votos avanzan a la elección general. Esto podría abrir la puerta a aspirantes inesperados o candidatos independientes con los recursos para captar atención mediática.

Andrew Acosta, un consultor demócrata, subrayó que la naturaleza de estas primarias puede complicar las predicciones sobre el resultado. «Es difícil prever el escenario,» afirmó Acosta.

Rumores y controversias

Porter ha estado en el centro de la controversia tras su inesperada pérdida en la carrera senatorial, cuando culpó a los «multimillonarios que gastan millones para manipular esta elección.» Desde entonces, ha aclarado que no cuestiona la integridad del proceso electoral californiano, pero mantiene que «manipulado» significa que se usaron métodos deshonestos.

Después de dejar su distrito en el sur de California a principios de 2023, ha continuado su labor como recaudadora de fondos y ha vuelto a enseñar en la Escuela de Derecho de la Universidad de California, Irvine. Antes de su carrera política, Porter se destacó como abogada especializada en protección del consumidor, ganándose el respeto de muchos por su habilidad para desmantelar la avaricia corporativa a través de sus incisivas interrogaciones en el Congreso.

«Me postulé para ocupar un cargo público para responsabilizar a Trump. Siento esa misma vocación de servicio ahora para evitar que continúe perjudicando a los californianos,» concluyó Porter en su video de campaña, marcando el inicio de su nueva aventura política.

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