Celebra la moda: mujer enfrenta a comensal por llamada ruidosa

Mujer desata polémica por un llamado a la cortesía en un restaurante

Una mujer de 50 años se encuentra en el ojo del huracán tras compartir su experiencia en un restaurante de lujo, donde pidió amablemente a una comensal que apagara su teléfono en modo altavoz. La situación, que ha causado revuelo en redes sociales, ha reabierto el debate sobre la etiqueta en lugares públicos.

La escena en el restaurante de lujo

En una publicación de Reddit, la mujer anónima relata que disfrutaba de una cena con su esposo y la pareja de su madre en un restaurante de cuatro estrellas cuando la tranquilidad del lugar se vio interrumpida por una conversación en altavoz de la mesa contigua. A medida que se servían los platillos principales, una mujer de mediana edad y un adolescente generaron un nivel de ruido que no pasó desapercibido para otros comensales.

«El ambiente era muy ruidoso y las personas a nuestro alrededor comenzaron a fijarse en la conversación», escribe la mujer. «A pesar de que los demás comensales intentaban disfrutar de su experiencia, la mujer continuó hablando a gritos con su teléfono colocado junto a su vaso de agua, mientras el adolescente parecía más interesado en su celular».

La reacción de la comensal

Ante la situación, varios comensales pidieron cambiar de mesa, lo que llevó a la mujer a tomar la decisión de intervenir. «Después de cenar, pero mientras esperábamos el postre, con el adolescente ya fuera de la mesa, me acerqué y le dije: ‘¿Podrías apagar tu teléfono en altavoz? Está causando muchas molestias a los que están alrededor'».

Como respuesta, la otra mujer argumentó que si la persona al otro lado de la línea estuviera presente, el nivel de ruido sería el mismo. La comensal, sin embargo, replicó: «Espero que no hables en voz alta si estuvieras sentada a menos de dos pies de distancia».

El desenlace y la reacción en redes

La discusión rápidamente escaló, y la mujer que hablaba por teléfono respondió afirmando que iba a bajar el volumen. Sin embargo, tras un cruce de comentarios sobre la situación, la mujer sentenció: «Escucha, soy una mujer adulta. Esto se ha acabado».

De camino a la salida, sus palabras resonaron en el aire: “Ok, ya se fueron, así que voy a subirlo de nuevo para poder escucharte”. Las reacciones en Reddit no tardaron en llegar, llenas de apoyo y críticas. Muchos defendieron la postura de la mujer que intervino, señalando que un teléfono en altavoz en público no solo afecta a quienes están alrededor, sino que perturba la atmósfera de un establecimiento destinado a la tranquilidad.

Entre la multitud de comentarios, uno resumió el dilema a la perfección: «Cuando se habla en altavoz, la conversación deja de ser privada. Deberían haber controlado esto en el restaurante al momento de sentarla». Sin duda, esta anécdota ha reavivado la conversación sobre la cortesía y el respeto en espacios públicos, especialmente en lugares donde se busca disfrutar de una experiencia gastronómica.